El contacto directo con la naturaleza es algo fundamental en la educación de nuestros niños y niñas, ya que les ayuda a desarrollar actitudes tan importantes como la paciencia, la tolerancia, el trabajo en equipo o el cuidado y respeto por la naturaleza. Además, en nuestro cole contamos con un fantástico espacio como es el huerto, el cual se convierte en un recurso fundamental, ya que es un espacio al aire libre en el que desarrollamos, además de las actividades propias del huerto, otras relacionadas con las distintas áreas de la educación infantil, convirtiéndose así, en un espacio importantísimo para el día a día de nuestro alumnado.
El pasado viernes 16 de febrero desarrollamos en nuestro cole una experiencia de siembra con el alumnado de Infantil, donde, tras el acopio de macetas realizadas con material reciclado (garrafas de plástico aportadas y preparadas por las familias), cada niño y niña sembró su maceta, asumiendo tareas de responsabilidad y cuidado.
Se sembraron, además de especies aromáticas, otras frutales como fresas y también cultivos de huerto como lechugas, rábanos, berenjenas o tomates, haciendo un guiño a la naturaleza, a nuestro huerto escolar y al reciclaje.
Con todas las garrafas etiquetadas y una vez plantadas, entre todos se formó una performance natural que llamamos “Reciclar con arte”, donde además de aprender sobre el medioambiente y la importancia de respetarlo, asumimos responsabilidades para contribuir a salvar el planeta con el lema: “El huerto no tiene género”.
Esperamos que durante este curso, al igual que en años anteriores, nuestros niños y niñas disfruten al máximo de este maravilloso espacio y de todas las posibilidades que nos ofrece el medio natural.
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